El Área de Obras y Equipamientos del Ayuntamiento de Madrid se encuentra ultimando la contratación de las obras de mejora de las condiciones de seguridad y accesibilidad de diversos puntos de la ciudad.
Entre los lugares en los que se intervendrá se encuentra el paso de peatones del barrio del Aeropuerto situado junto a la rotonda de la Avenida Sur del Aeropuerto de Barajas (M-22).
Según los planos a los que Aeropuerto Participa ha tenido acceso, el paso de peatones se desplazará hasta situarlo antes de la curva que forma el enlace desde la M-14 con la Avenida Sur del Aeropuerto de Barajas. De esta forma, se espera facilitar la visibilidad de las personas que crucen con el fin de mejorar la seguridad vial.
Las actuaciones previstas incluyen la demolición de carril derecho para ubicar una losa de hormigón armado sobre la que apoyará la acera del nuevo desembarco del paso de peatones, la reconstrucción de los vados peatonales y las bandas de pavimento táctil, la reubicación de señales y la delimitación de itinerario peatonal mediante nuevo vallado.
El lote 1 del contrato, cuya licitación tenía un valor de partida de 999.598,30 € de los que 53.677,95 € correspondían a la actuación del barrio del Aeropuerto, ha sido adjudicado por 746.200,13 € a la empresa VIRTON, S.A.

Años de problemas y un atropello mortal
Desde que en 2002 el Ministerio de Fomento autorizase la creación de la M-22, que supuso la ampliación de la carretera que unía el barrio del Aeropuerto con la Avenida de la Hispanidad y la creación de un acceso desde la autopista M-14, este paso de peatones ha sido objeto de quejas y accidentes.
En el año 2017, la vecindad de la barriada solicitó a través de los presupuestos participativos la instalación de semáforos que regulasen el tráfico, aunque esta opción fue descartada por los servicios técnicos municipales debido “a la afluencia constante, pero reducida, de peatones”.
Los vehículos, en algunos casos, circulan a una velocidad superior a la permitida, no respetando la prioridad de paso según reconoció el propio Ministerio en el año 2017 tras un accidente que acabó con la vida de Jesús Almazán, trabajador del Grupo Envera.
Tras las quejas vecinales y de la Junta de Distrito al Ministerio, Fomento se comprometió a instalar resaltos y señales luminosas que facilitasen la visibilidad peatonal, aunque trasladó la semaforización del paso peatonal al Ayuntamiento esgrimiendo que, pese ser una vía de su competencia, “el carácter urbano de la zona” hacía que la responsabilidad recayese en el Consistorio.
El Ayuntamiento alegó que la intervención no permitía actuar en este punto por no ser de titularidad municipal, aunque en 2019 finalmente se redactó el proyecto y comenzó la licitación de las obras.
Una vez adjudicado y formalizado el contrato, las obras tendrán una duración prevista de 6 meses.
Más información
Expediente de contratación de las obras en la Plataforma de Contratación del Sector Público