Tras las quejas vecinales por el uso ilegal como aparcamiento de la parcela situada en la calle Trespaderne nº 18 que llevaron a la intervención del Defensor del Pueblo en el año 2019, la vecindad del barrio del Aeropuerto está ahora más cerca de poder disfrutar de un nuevo espacio verde.
El Área de Desarrollo Urbano ha segregado y traspasado recientemente al Área de Medio Ambiente y Movilidad este terreno con una superficie de 5.213 m², y que formaba parte hasta ahora de una parcela mayor con una superficie total de 37.692 m² que fue cedida gratuitamente al Ayuntamiento de Madrid por la Inmobiliaria Roiz en la década de 1970 como parte de las cesiones obligatorias requeridas para crear zonas verdes, destino urbanístico que no se ha materializado en más de 50 años.
Con el tiempo, la superficie calificada como zona verde se vio reducida debido a la creación de la carretera de acceso al aeropuerto de Madrid-Barajas pero no así los límites de la finca registral. Al no haberse realizado la correspondiente segregación, hasta ahora existía una disconformidad entre el planeamiento y los límites reales de la parcela, que albergaba distintos usos. Tampoco se encontraba incluida en el inventario correspondiente, estando en el de viales y no en el de zonas verdes, dificultando las actuaciones para convertir este espacio en un nuevo parque como se había previsto en los años 70.
Un aparcamiento ilegal
Tras la desaparición de la Inmobiliaria Roiz sin que llegara a finalizar la urbanización del barrio Aeropuerto, en torno al año 2000 el Ayuntamiento ejecutó un estacionamiento para coches, actuación contraria a la legalidad urbanística que ha privado a la vecindad del disfrute de más de 5.000 metros cuadrados de zonas verdes.
Tras más de dos décadas bajo este uso ilegal, en el mes de octubre de 2019 el Ayuntamiento de Madrid se comprometió a ajardinar la zona. El Consistorio dio así respuesta al contundente escrito que el Defensor del Pueblo le hizo llegar en el mes de mayo de 2019 tras las quejas vecinales ante los usos ilegales de las zonas verdes del ámbito y la vulneración de derechos fundamentales.
Este avance en la tramitación administrativa supone desbloquear el único impedimento que el Área de Medio Ambiente había planteado para ejecutar el nuevo parque. No obstante, el vecindario tardará en verlo realizado ya que aún quedaría por delante la redacción del proyecto, incorporar una partida presupuestaria para las obras y ejecutar las actuaciones, todo ello restando menos de un año para el final del mandato municipal.
Propuesta de Presupuestos Participativos
En paralelo a la queja presentada ante el Defensor del Pueblo, la vecindad solicitó la creación de un parque lineal en la calle Trespaderne durante el proceso de Presupuestos Participativos 2017. La propuesta, con un coste estimado de 750.000 €, fue la tercera más votada del distrito de Barajas.
Fue precisamente la necesidad de llevar a cabo el proceso de regularización registral que recientemente se ha completado la razón que la Dirección General de Participación Ciudadana esgrimió para declarar inviable la ejecución del proyecto de Presupuestos Participativos.
Los escritos de alegaciones presentados por la asociación vecinal Aeropuerto Participa contra esta decisión planteaban que la competencia para realizar dicho proceso de regularización era plenamente municipal, por lo que no podría considerarse que la ejecución de la propuesta pudiese ampararse en la causa de inviabilidad “trámites previos de resultado incierto”. Desde Aeropuerto Participa consideran que los recientes avances demuestran que sus alegaciones estaban fundamentadas y que la resolución de la Dirección General de Participación Ciudadana del Ayuntamiento debería ser revocada.
Más información
Escrito del Defensor del Pueblo en el que transmite la respuesta del Ayuntamiento de Madrid
Ficha de la parcela original en el inventario de Patrimonio Municipal de Suelo
Decreto por el que se traspasa la parcela al Área de Medio Ambiente y Movilidad
Parece que lejos de favorecer al ciudadano en demandas lógicas, y administrando el dinero de todos , lo que prevalece son las pegas continúas y retrasos en lo que ya está acordado. Necesitamos zonas para vivir y queremos se respeten nuestras zonas de ocio.